Obseqium amicos, veritas odium parit.

Hoy, voy a hablar de una anécdota que ha pasado esta mañana. Bueno, quizá varias...
Los lunes en gimnasia toca volleyball, y nos tenemos que poner en grupos. Pues de vez en cuando, yo jugueteaba (no saquéis las cosas de contexto), y luego, al darse la vuelta, hacía lo que me salía en ese momento del alma: ponerle malas caras.
Además, esta entrada y, sobre todo el título, se lo dedico a mi amiga Noelia, porque se lo merece, ¡por hipócrita, como yo!
Pues resulta que en dichos grupos, ella estaba en el de la Mothafucker, y con toda alegría se puso a jugar con ella, mientras que pensaría por dentro ay, Dios, que se acabe esto, pero ya...
Obseqium amicos, veritas odium parit: Esta frase viene a decir "el servilismo produce amigos, la verdad, odio", y es totalmente verdad. Imaginaros un mundo en el que la primera cosa que se nos ocurriera de alguien la dijéramos. Todo el mundo estaría descontento y enfadado con todos. No tendríamos amigos.
Esta es una frase, como podéis ver, bastante hipócrita (¡como yo!). Nada de decir la verdad si sabéis que al otro le va a doler o lo que sea: si con alguien tampoco te llevas muy bien o tienes poca confianza con esa persona, silencio, es lo que mejor puedes hacer.